Bully Dance es un cortometraje de dibujos (10') producido por UNICEF y National Film Board of Canada.
Es un corto en el que se identifica las conductas de maltrato y el proceso de victimización. No hay palabras y el mensaje llega al espectador de forma clara y contundente. Visualmente es interesante y la banda sonora es rítmica y acertada. El objetivo es estimular la discusión en el grupo clase sobre el tema del bullying o acoso escolar.